Beneficio de practicar con los acompañamientos
Los acompañamientos pueden ser un complemento maravilloso para la enseñanza, tanto en la casa como durante la clase. Por medio de las pistas, los alumnos descubren un mundo de sonidos, melodías y armonías que los educan y los motivan. Los acompañamientos se puedan usar durante el ciclo completo de aprendizaje, desde la primera vez que se escucha una pieza hasta la interpretación final.
Introducción y exploración
Pídale a sus alumnos que escuchen los acompañamientos una semana antes de introducir la pieza en la clase. Esto ayuda a preparar el oído para percibir el carácter, tempo y ritmo de la pieza. En la siguiente clase, demuestre la pieza tocando con el acompañamiento a la velocidad ideal. Luego, involucre al alumno pidiéndole marcar el ritmo, señalar cada nota junto con la grabación o cantar la letra, los nombres de las notas o los números de los dedos. Esto puede hacerse a un tempo cómodo para el alumno.
Práctica rítmica
En el “modo normal” de práctica, tocar con los acompañamientos exige un ritmo correcto. Los estudiantes aprenden a sentir el compás y la dirección natural de la música, comprendiendo la necesidad de continuar sin interrupciones. Todo esto hace que la práctica individual sea más productiva. Algunos alumnos se benefician de practicar con las manos separadas y otros con las manos juntas.
Crecimiento musical
Las diferentes muestras en estas grabaciones presentan una variedad de sonidos y ensambles. Al exponerse a estas interpretaciones orquestales los alumnos crecen musicalmente y se motivan a tocar con vitalidad rítmica, fluidez y expresión musical.
Repetición y repaso
Para motivar mejor a los alumnos, repase el repertorio pasado tocando con los acompañamientos.